Nuevo piso de desempleo

El piso histórico de la desocupación en la Argentina fue del 4%. Hoy los analistas señalan que por el deterioro social y la baja elasticidad será muy difícil llevar el desempleo por debajo del 8%.

PorAnnabella Quiroga

Con el desempleo en el 7,9%, la situación laboral en la Argentina parece estancarse en una nueva tasa de desempleo natural. Históricamente, la desocupación en el país tuvo un piso del 4%. Pero el deterioro del tejido social de las últimas décadas aumentó la cantidad de gente "inempleable", lo que hace prácticamente imposible volver a esa tasa, según un datos de la Universidad Di Tella. Otro de los motivos que complica la baja del desempleo es que la elasticidad empleo-producto está en 0,2, el mismo nivel presentaba a comienzos de los años noventa. La suba del costo laboral es una de las razones, ya que los expertos dicen que los incrementos salariales superan la mejora de la productividad

El Centro de Investigación en Finanzas de la Universidad Torcuato Di Tella presentó días atrás el Indice Laboral de América Latina (ILAM), con las proyecciones para el mercado argentino para el año próximo. De allí surge que se espera que las condiciones del mercado laboral mejoren levemente durante el resto de 2010, aunque el desempleo volverá a aumentar el año que viene y se ubicará en torno al 8,5%.

En la Argentina aún no se recupera todo el terreno perdido a causa de la crisis. El investigador Martín González Rozada sostiene que el deterioro de la situación social en las últimas décadas ha redefinido el mercado laboral. "La tasa histórica de desempleo en la Argentina, ­antes de las crisis hiperinflacionarias y del derrumbe de la convertibilidad­ se situaba en el 4%", detalla. A pesar de las mejoras que ha habido en el empleo ­con 400.000 puestos creados en los últimos 12 meses­, González Rozada asegura que "es muy difícil que en estas condiciones la Argentina vuelva a tener una tasa de desempleo natural del 4%. El nuevo piso parece situarse en torno al 8%".

La razón principal es que las sucesivas crisis han complicado la inserción laboral de nuevas generaciones que, por falta de estudios básicos, han quedado expulsadas del mercado. González Rozada sostiene que hoy "la duración promedio del desempleo es de un año. A quienes se quedan sin trabajo les cuesta mucho salir de esa situación, y en general, la salida que encuentran los lleva a la informalidad".

Para conseguir perforar este nuevo piso del 8% "haría falta una política fuerte de inversión en educación, cuyos resultados solo se verían de aquí a 15 años", menciona Guido Sandleris, director del Centro de Investigación en Finanzas. Las proyecciones de la entidad muestran que para el año próximo habrá una suba del 0,6% en el indicador, que llevará la desocupación a 8,5%.

A la falta de preparación para el mercado laboral actual se suma el efecto de la baja en la elasticidad entre el producto y el empleo. Según Ernesto Kritz, a la salida de la crisis, por cada punto de mejora del PBI, el empleo aumentaba también casi un punto. Parte de esta elevada elasticidad se debió a la fuerte caída del costo laboral que siguió a la devaluación ­25% para el promedio de la economía­ y al cambio en los precios relativos de factores. "La recuperación de la demanda agregada se combinó con una situación inicial de alto desempleo y bajo costo laboral", dice Kritz. Hoy la elasticidad descendió a un nivel próximo a 0,2. Entonces, por cada punto que crece el producto, el empleo crece solamente 0,2.

Esto explica que, en el primer semestre de 2010, con la economía expandiéndose a más del 8%, la generación de empleos de mercado ­excluyendo los planes sociales­ no haya superado el 1,2%.

Esta mejora permitió la creación de 400.000 puestos de trabajo que se concentraron en los sectores que más pujanza exhiben, como las automotrices. El director comercial de la consultoría en recursos humanos Adecco Argentina, Patricio Dewey, sostiene que "en los primeros nueve meses de 2010, frente a igual período de 2009, tuvimos un incremento del 50% promedio en la demanda para posiciones permanentes y del 18% en la demanda de personal temporario".

Dewey detalla que los mayores incrementos de pedido de personal se han dado en sectores como el automotriz y autopartista, donde hubo incrementos superiores al 100% respecto de la recesión registrada en 2009. Además, detectaron subas del 20% para el sector de manufactura y una demanda estable en el resto de los rubros.

"Son indicadores que señalan una mejoría en el mercado laboral y una incipiente reactivación luego de un año muy complejo como fue el de la crisis internacional", sostiene Dewey. El mayor impulso en la demanda en lo que va de 2010 se centró en perfiles operativos para producción, técnicos para distintas áreas, administrativos contables y fuerza de ventas. Y continúa en crecimiento la demanda para sectores que no se habían visto tan afectados por la crisis, como el sector de tecnología