Developing Companies for Real People

lunes, 21 de enero de 2013

Información Cursos


Como veo mucha gente interesada en el tema, paso la información.
Saludos
Adriana Ceraso

https://eventioz.com.ar/events/curso-de-performance-marketing


En la plataforma de Eventioz encontrarás los links para poder compartirlo.

INFORMACIÓN DEL CURSO

::: Programa y Fechas  :::
https://eventioz.com.ar/events/curso-de-performance-marketing/agenda

::: Docentes :::
https://eventioz.com.ar/events/curso-de-performance-marketing/speakers

::: Costo del Curso y Registro :::
https://eventioz.com.ar/events/curso-de-performance-marketing/registrations/new

Cualquier duda o consulta estoy a tu entera disposición.

Un fuerte abrazo

Jonathan Baldovino
@jbaldovino

Jóvenes condenados a vivir en el margen


Tal vez no les importó que otros los vieran. Tal vez saben que sus caras no importan porque nadie repara demasiado en ellas. Ni en ellos. Son, en ese sentido, invisibles. Hasta que "algo" pasa (y lo que pasó hace un mes fueron saqueos en Bariloche, Rosario, y así hasta llegar a 40 ciudades, a 292 comercios, a 26 millones y medio de pesos perdidos, a 500 detenidos y a 4 muertos) y entonces sí: los vemos. De golpe y de a montones. Son chicos de catorce, veinte y no muchos más años en el remolino de cada andanada. ¿Que hubo quienes sólo fueron a mirar? ¿Que también hubo adultos? Seguro. Hubo adultos, mayores y hasta niños. También salteadores que se presentaron a la cita en camionetas, y se hartaron de cargar electrodomésticos y pantallas gigantes. Pero eso no implica desconocer la impronta joven de esa marea que irrumpió en supermercados y almacenes, y que se vuelve dato: la mitad de los muertos de aquellos días no tenía ni 25 años.
¿Quiénes son? ¿Por qué están ahí? El proceso, coinciden los especialistas, podría resumirse en décadas de industrias (y familias) desmanteladas. Ya hace 20 años estaban ahí, sólo que pocos querían verlos y además no eran tantos. Y ahí siguen: encerradas en sus casas algunas y criando ya un primer bebe (en la Argentina, 1 de cada 3 madres tiene menos de 24 años), agrupándose otros en las esquinas, reptando de la plaza al cíber algunos más. Evidentemente, el universo «ni-ni» (el de los jóvenes que ni trabajan ni estudian) nombra una realidad demasiado compleja para caber en cuatro letras.