Asesoramiento en procesos de creación de Employer & Employee Branding.
Definición de acciones creativas para atraer y fidelizar actuales y potenciales empleados.
Sugerimos y acompañamos en el diagnóstico, implementación y medición de resultados.
Tal vez no les
importó que otros los vieran. Tal vez saben que sus caras no importan porque
nadie repara demasiado en ellas. Ni en ellos. Son, en ese sentido, invisibles.
Hasta que "algo" pasa (y lo que pasó hace un mes fueron saqueos en Bariloche,
Rosario, y así hasta llegar a 40 ciudades, a 292 comercios, a 26 millones y
medio de pesos perdidos, a 500 detenidos y a 4 muertos) y entonces sí: los
vemos. De golpe y de a montones. Son chicos de catorce, veinte y no muchos más
años en el remolino de cada andanada. ¿Que hubo quienes sólo fueron a mirar?
¿Que también hubo adultos? Seguro. Hubo adultos, mayores y hasta niños. También
salteadores que se presentaron a la cita en camionetas, y se hartaron de cargar
electrodomésticos y pantallas gigantes. Pero eso no implica desconocer la
impronta joven de esa marea que irrumpió en supermercados y almacenes, y que se
vuelve dato: la mitad de los muertos de aquellos días no tenía ni 25 años.
¿Quiénes son? ¿Por qué están ahí? El proceso, coinciden los especialistas,
podría resumirse en décadas de industrias (y familias) desmanteladas. Ya hace 20
años estaban ahí, sólo que pocos querían verlos y además no eran tantos. Y ahí
siguen: encerradas en sus casas algunas y criando ya un primer bebe (en la
Argentina, 1 de cada 3 madres tiene menos de 24 años), agrupándose otros en las
esquinas, reptando de la plaza al cíber algunos más. Evidentemente, el universo
«ni-ni» (el de los jóvenes que ni trabajan ni estudian) nombra una realidad
demasiado compleja para caber en cuatro letras.